Beneficios de nutrir tu salud emocional

Autor: Lili Bosnic –  lili@lilibosnic.com

Desde pequeños aprendemos el arte de nutrirnos de afectos.

El clima emocional acompaña cada paso de nuestra vida y el recibir, de las figuras significativas de la infancia, la experiencia de ser amados, constituye los cimientos de nuestra personalidad, nuestra armonía y salud.

Pero, no sólo el amor es un recurso para el alma.

En realidad, todos los afectos configuran un repertorio de herramientas que alimentan la totalidad de la persona. Ellos no son ni buenos ni malos, sino que son procesos mediante los cuales logramos reaccionar adaptativamente a las demandas de la vida. Inclusive aquellos de los cuales no hay buena prensa, como la envidia o el odio, cumplen una tarea importante en la dinámica de la existencia.

De esta manera, las emociones son nutrientes de nuestro mundo psíquico y biológico.

A su vez, el cuerpo demanda  ciertas sustancias -vitaminas, minerales y oligoelementos-, que en cantidades pequeñas son necesarias para el equilibrio de las diferentes funciones vitales.

Sin embargo, estamos entrenados para, en lugar de aceptar y expresar lo que sentimos, lo reprimimos y censuramos. Y, ocurre que los afectos suprimidos no desaparecen sino que persisten en nuestro interior y buscan maneras de darse a conocer por otras vías: ellos se materializan en nuestro cuerpo y  surgen entonces las afecciones, pudiendo la indignación contenida, por ej., transformarse en hipertensión.

También es cierto que la represión de los afectos no es casual sino que esta anudada a memorias de dolor.

Ciertos afectos se excluyen de nuestra memoria consciente con la finalidad de apartar de nuestra vida el dolor que evocan. Pero, el hecho de que no estén presentes en la consciencia no significa que hayan desaparecido.  Por el contrario, su omisión consolida una memoria inconsciente que ata y roba la posibilidad de vivir plenamente la vida y ser auténticamente, nosotros.

Entonces, de la misma manera que la nutrición emocional es imprescindible, la liberación emocional también lo es y se conocen ya, muchas técnicas para lograrlo.

En lo personal, mi corazón se emociona cuando ofrezco ayuda a través de la consulta con Terapia Floral, Terapia de Vidas Pasadas  y              Ho´oponopono y es,  éste último,  una filosofía de vida que si incorporas a tu vida cotidiana, te permite de una manera sencilla, liberar la cochambre emocional.

Ya lo sabes….entonces…. Sé responsable y ¡¡haz tu chamba!! 

Gracias, gota de rocío