Cicatriz que cura
Cristóbal es un señor de 70 años que conocí un día estando de guardia. Durante el mes de agosto del año pasado me llamaron para atender un paciente en su domiclio, convalesciente de una operación. En junio 2004, a Cristóbal le habían sacado un pulmón, que estaba afectado de cáncer. Él no sabía nada de su dolencia, tosía bastante, sólo ingería líquidos, estaba asustado, y aún mantenía cama. Su familia sufría por él, y no sabían qué hacer para animarle.
Le hablé de las flores de Bach y le dije que creía que le podían ayudar… a recuperar la entereza, el hambre y a superar el atropello físico que significaba una intervención de este tipo. Enseguida me dijo que quería probarlo.
Entonces prescribí:
Rock Rose, por el susto y el shock posterior a la intervención;
Walnut, para adaptarse a la situación nueva de estar enfermo y dependiente;
Agrimony, por la ansiedad que estaba manifestando;
White Chesnut, por la tos;
Chesnut Bud, por aquello de la Escuela India que prescriben CHB a los pacientes enfermos para que no repitan errores y no se queden en el “carril de la enfermedad” y
Olive, para superar el agotamiento de una situación personal tan estresante. También por la calma mental que proporciona.
A los 10 días Cristóbal se levantó de la cama. Había recuperado las ganas de comer y empezaba a sentir mejor ánimo. Su familia está muy agradecida.
Dos meses después, Cristóbal sigue tomando las gotas porque siente que le ayudan mucho. En este momento, a principios de octubre 04, le encuentran una fístula broncopleural, por la que supura pus y sangre por lo que le han colocado un drenaje con una bolsa colectora. Su médico le dice que se haga la idea que estas fístulas no suelen cerrarse y que tendrá que acostumbrarse a llevar el drenaje “toda la vida”.
Sigue tomando las flores de Bach.
Vuelvo a verlo en marzo 05. Me explica que en el hospital, al hacerle la curación no pueden poner el drenaje nuevo porque la fístula se ha cerrado espontáneamente. El médico le explica que lo operarán para colocarle el drenaje y Cristóbal se niega – “Para ponerme un drenaje nuevo siempre estamos a tiempo, a mí no me vuelven a operar, hagan controles y a ver que pasa» –
Modifico un poco su fórmula. Retiro AGR, WCH y CHB. y añado:
Star of Bethlehem, para ayudarle en la cicatrización,
Gorse, para la capacidad de lucha en situaciones largas,
Scleranthus, parece que oscila entre estar muy animado y estar triste, y
Gentian, para que pueda vivir su situación con optimismo.
Control a los 8 días: no tiene retención de pus ni de ningún líquido. La herida está cerrada y limpia.
Control a los 15 días: todo está bien.
Controles mensuales: todo está en órden.
Su médico se pregunta cómo ha podido cicatrizar tan bien y tan rápido
Cristóbal, por su parte, está convencido que lo que le ha ayudado tanto son las flores de Bach. Comparto esta idea con él, y también sé que su constancia en tomarlas, y lo bien que ha conectado con las ideas y el pensamiento del Dr. Bach, le han ayudado mucho.
Quiere ir un día al encuentro de los Viernes activos a compartir su experiencia.