Flores de Bach dinamizadas con la técnica homeopática.
Desde hace mas de dos décadas, y siguiendo con enseñanzas y desarrollos del Dr. Edward Bach, varios terapeutas de diferentes países comenzaron a interrogarse e investigar la posibilidad de trabajar con los remedios florales preparados con la técnica homeopática a diferentes potencias y hacer converger Homeopatía y Terapia Floral en el trabajo clínico.
Sin duda, los textos del Dr. Franco Rossomando (Homeopatía y Terapias Florales) y la Mta. Selma Vijsnovski (Un paso mas) han sido fundamentales en esta dirección. Por mi parte, he tratado de difundir esta mirada y quiero resumir en este artículo algunas ideas sobre el tema y como incorporar las esencias florales dinamizadas a la práctica de la clínica floral. No hay que olvidar que, después de todo Bach también fue homeópata.
Hay en principio dos maneras básicas de usar los recursos homeopáticos en el campo floral:
– El primero es la combinación de los remedios florales y homeopáticos que generan una sinergia significativa que mancomunada aporta a los pacientes y terapeutas una magnífica ayuda. Todos aquellos que hemos puesto en práctica la prescripción de ambos tipos de remedios (floral y homeopático) hemos visto los positivos resultados de tal acción. A veces en frascos paralelos, otras en un mismo gotero, de ambos modos provee un efecto sanador sorprendente.
– El segundo, consiste en recurrir a las esencias florales dinamizadas a diferentes potencias, en mi caso particular he trabajado con los niveles de 12, 30, 200, 1000 y 10.000 CH.
Con esta técnica existen dos modalidades:
a) una consiste en prescribir por el conocimiento de ciertas repertorizaciones de respuestas clínicas que coinciden con alguna potencia floral determinada, lo que implica un conocimiento que por ahora es muy joven en la Terapia Floral ya que carecemos de repertorios como los que posee la homeopatía;
b) la otra manera es utilizar las esencias florales dinamizadas y con un criterio clínico floral en las siguientes circunstancias:
1. Personalidad: cuando se quiere trabajar la personalidad de un paciente a niveles crecientes de profundidad, luego que hemos visto que el trabajo a la dosis Bach ya se ha estancado en sus efectos pero queremos continuar en esta dirección. En este sentido la acción de los remedios potenciados y utilizados progresivamente es poderosamente curativa.
2. Patrón emocional: del mismo modo cuando se quiere trabajar sobre una pauta emocional muy arraigada en el paciente y no se consigue disolverla a las potencias florales, el recurrir a las potencias homeopáticas de las esencias florales es un recurso que llega muy profundamente y produce el efecto buscado.
3. Síntomas: existen suficientes pruebas clínicas sobre la acción floral sobre ciertos síntomas particulares y muchas veces vemos que el remedio floral pareciera no terminar de revertirlo y sanarlo. Esta es, entonces, una condición para recurrir a las dinamizaciones y puede apreciarse al hacerlo sus buenos resultados.
4. Patrones transpersonales: del mismo modo y utilizando la técnica creada por el Dr, Ricardo Orozco que implica trabajar sobre los patrones propios de cada remedio floral, por analogía con las manifestaciones clínicas de los pacientes, pero agregando aquí el progresivo uso de dinamizaciones florales, alcanzando así resultados donde la prescripción habitual parece detener su acción.
5. Zonas corporales: también existen relaciones clínicas comprobadas entre órganos, glándulas y zonas corporales y remedios florales. Así, por ejemplo, el Willow y la vesícula biliar. Cuando proporcionamos a un paciente con una alteración en este órgano este remedio dinamizado vemos como su acción puede mejorar de un modo visible cuando la potencia habitual ya no lograba los efectos deseados.
En suma, cuando esté frente a un paciente y perciba que el remedio que le había prescripto parece no dar resultado o no da los esperados, no cambie de remedio, tal vez lo que necesita es cambiar la potencia del mismo.
Autor: Eduardo H. Grecco
e-mail: eduardohoraciogrecco@gmail.com
